Las redes y su cuota de peligro
Dan y Diggy irradiaban alegría juntos, y este dúo fotogénico no pudo resistirse a compartir su extraordinaria amistad en Instagram y Facebook. Sus imágenes se volvieron viralmente populares, y ayudó que Dan fuera músico con una sólida base de seguidores en línea. Los fans de Dan se enamoraron de Diggy y su personalidad amable y gentil.
Pronto, las redes de Dan se llenaron de personas que no lo seguían por su música o atractivo, sino por las adorables fotos de su peludo compañero. Sin embargo, entre todos los elogios, hubo quienes notaron algo en esas imágenes que los llevó a tomar una drástica medida: llamar a la policía local y presentar una denuncia…